FASE 7.0: La tenacidad (Medialab - CCBA)
¿Qué es un dipositivo?
“Es fácil hacer corresponder a cada sociedad distintos tipos de máquinas, no porque las máquinas sean determinantes sino porque expresan las formas sociales capaces de crearlas y utilizarlas. Cada dispositivo tiene su régimen de luz, la manera en que ésta cae, se esfuma, se difunde, al distribuir lo visible y lo invisible. Y, además, los recorren líneas de fuerzas que no cesan de penetrar las cosas y las palabras, que no cesan de librar una batalla. La línea de fuerzas se produce "en toda relación de un punto con otro" y pasa por todos los lugares de un dispositivo”. (Deleuze, Gilles)
A través de La tenacidad y el uso de nuevos dispositivos, buscamos pero también descubrimos, hacer visibles y enunciables, en este caso audibles, nuevas sonoridades. Impulsamos nuevas relaciones de escala entre sonidos micro y macro a través de saltos intensivos e intempestivos, que hacían aparecer virtualidades que estaban ahí como posibilidades que se actualizaron en la obra. Esos sonidos desconocidos que se hacen posibles a partir de nuevas combinaciones entre los dispositivos y las cosas, representan nuestras líneas de fuga. En éstas, nos desviamos de lo predecible y fuimos tomando nuevas formas o informándonos en el proceso de creación y producción colectiva haciendo audible lo inaudible, expandiendo nuestra potencia sensorial y afectiva. (*)
Líneas de subjetivación
“Una línea de subjetivación es un proceso, es la producción de subjetividad en un dispositivo: una línea de subjetivación debe hacerse en la medida en que el dispositivo lo deje o lo haga posible. Es una línea de fuga. Escapa a las líneas anteriores. Los dispositivos tienen, pues, como componentes líneas de visibilidad, de enunciación, líneas de ruptura, que se entrecruzan y se mezclan y suscitan otras a través de variaciones y mutaciones. Lo uno, el todo, lo verdadero, el objeto, el sujeto no son universales, sino que son procesos singulares de subjetivación, procesos inmanentes a un determinado dispositivo. Pertenecemos a ciertos dispositivos y obramos en ellos. La novedad de unos dispositivos respecto de los anteriores es lo que llamamos su actualidad, nuestra actualidad. Lo actual no es lo que somos sino que es más bien lo que vamos siendo”. (Deleuze, Gilles)
La tenacidad como resultado de un hacer colectivo procesual representa para nosotros una línea de subjetivación que pone de manifiesto nuevas relaciones de fuerza. Las señales, los flujos de electrones, las frecuencias audibles van de un lado a otro generando nuevas relaciones, otras resonancias, otros ritmos, otras tonalidades, otros impases... Este proceso de producción creativa, entendido desde el punto de vista cultural, resulta transformador de la sensibilidad. Nuestras multiplicidades pierden su individualidad para conformar juntos un agenciamiento colectivo que no es igual a la suma de las partes. Fuerzas intensivas sin coordenadas toman un camino de desvío en el proceso donde intervienen y, en algunas detenciones, se unifican creando puntos o nodos donde anclar y dar forma a esta obra singular. Ese proceso de subjetivación que se genera en el mismo proceso de creación colectiva deviene y se plasma en la obra haciendo imperceptible el origen. La obra, como una marioneta, se suelta de los piolines que la sostieneny funcionar como circuito cerrado. Los hacedores sólo dejamos en ella nuestras huellas en términos de afectos. En tanto proceso de subjetivación asociado a nuevos dispositivos, La Tenacidad se fuga de lo conocido. “Hace aparecer” lo nuevo que habilita nuevas escuchas. (*)
Bricoleur o la “lógica de lo sensible”
“Bricoleur es eso que actúa y conoce según una lógica de lo sensible, es decir, a aquél que es capaz de captar relaciones de modo directo en lo sensible mismo. Esto supone que lo sensible no puede ser concebido como materia indiferenciada y abstracta, sino como una dimensión de lo real, como un conjunto de signos entre la materia y la forma, entre la imagen y el concepto. La lógica del bricoleur se basa en el “placer de la mente humana en encontrar en lo sensible relaciones entre signos, en vistas a crear disposiciones nuevas, nuevos agenciamientos. La materia sensible con la que trata el bricoleur es una naturaleza activa que emite signos, (trozos de madera, fragmentos de hierro, alambres, chapas, papel, circuitos, cables, cartón, vidrio), pero no de la cultura humana como conjunto de significaciones, sino que su trabajo consiste en articular sus residuos”. (Sztulwark, Diego)
Los que hicimos La Tenacidad somos muchos y las ideas sobre qué es la técnica y qué es lo humano son múltiples. ¿Qué de lo humano es artificio? ¿Qué del artificio es humano? Sin respuestas consensuadas, el diálogo nos enriqueció puesto que, aun razonando desde paradigmas diferentes, pudimos conectar nuestra obra desde una sensibilidad compartida. Establecimos así nuevas relaciones sensibles entre lo analógico y lo digital, entre lo tangible y lo intangible, entre la forma y lo informe, entre texturas y códigos de programación, entre acciones y reacciones, entre el hardware, el software y las cosas, que vincularon lo sensorio-simbólico (binario y numérico) y lo sensorio-motriz (electromecánico). De esta manera, de ceros y unos y chapa, de líneas de código y vidrio, de arduinos y raspberries, de solenoides y platillos, de cables y amplificadores, de fuentes de energía eléctrica artificiales y de nuestras propias fuentes de energía eléctrica humana, surge un bricoleur como agenciamiento de ritmo que se nos “aparece” a modo de vibración continúa. Un acontecimiento resonante que arma su melodía en el “entre” del pasaje de analógico a lo digital y de lo digital a lo analógico como un nuevo modo de expresión, tal como las ideas y los afectos aparecen en un poema sin separaciones ni discontinuidades. (*)
MediaLab CCEBA
"La raíz de la praxis artística está en la producción de la subjetividad; poco importa el modo particular de producción. ... Las obras producen espacios-tiempo relacionales, experiencias interhumanas que tratan de liberarse de las obligaciones de la ideología de la comunicación de masas, de los espacios en los que se elaboran; generan, en cierta medida, esquemas sociales alternativos, modelos críticos de las construcciones de las relaciones amistosas. … La obra de arte se presenta como un intersticio social, dentro del cual estas experiencias, estas nuevas "posibilidades de vida", se revelan posibles.” (Bourriaud, Nicolas)
El Laboratorio Maratón de Producción es un espacio en el que la “experiencia” es la protagonista. Pensado como un ámbito de intercambio, en el que artistas en formación y estudiantes pueden participar de un proceso de producción de obra, de la mano de un artista profesional. El Laboratorio propone un esquema maratónico, 42 horas intensivas para realizar la obra y un espacio de diálogo constante en el que dicha producción surge como forma de intercambio entre los participantes. Este año el artista invitado fue Jorge Crowe, encargado de llevar el timón en esta nave que traza su propio derrotero, en la producción de una experiencia artística colectiva, interviniendo objetos, construyendo propios, creando un discurso sobre la tenacidad. (Emiliano Causa y Matías Romero Costa, coordinadores MediaLab CCEBA)
Artistas: Felipe
Arenas, Silvia Barrios, Brenda Bazán, Agnes Cajaiba, Constanza Casamadrid,
Jorge Crowe, Daniel Contarelli, Carolina Di Palma, Carlos Grassi Horn,
Laura Ige, Mariana Lombard, Nahuel Lombardo, Valeria Marraco, Cisca
Martín, Lucas Pérez Scigliano, Juan José Rodríguez, Laura Rubiano, Juan León
Sarmiento, San Soto.
Proceso
La
tenacidad es el proceso emergente de la
Maratón de Producción 2015 del Medialab del CCEBA. Este espacio se propuso como
un laboratorio colaborativo en el que los participantes comparten el desarrollo
de una obra de arte electrónico, guiado en la presente edición por Jorge
Crowe, durante el término de 42 horas (6 encuentros).
Nombramos a esta obra con la palabra Tenacidad por su color, por su trama, por su ruido, por su espesura, por su fuerza. Como una red neuronal en loop, que retroalimenta su entrada con su propia salida, La tenacidad pretende revelar la porfía de las máquinas, que persistirán en la ejecución de su programación, oyendo y sonando, ajenas al agotamiento de nuestra especie.
Nombramos a esta obra con la palabra Tenacidad por su color, por su trama, por su ruido, por su espesura, por su fuerza. Como una red neuronal en loop, que retroalimenta su entrada con su propia salida, La tenacidad pretende revelar la porfía de las máquinas, que persistirán en la ejecución de su programación, oyendo y sonando, ajenas al agotamiento de nuestra especie.
La
convocatoria se centró en explorar la sonorización de espacios mediante el uso
de sistemas electromecánicos y la búsqueda de una espacialización del origen
del audio, invitando a trayectos y reposos, a una percepción auditiva
expandida. Partiendo de estas premisas, se arribó a un prototipo donde
los circuitos y mecanismos se vinculan entre sí mediante procesos de acción/reacción
que prescinden de la intervención de humanos cuando ya está en
funcionamiento.
En el proceso de
producción colectiva en el laboratorio usamos transductores parlantes para escuchar sonidos
en otras membranas conductoras como vidrio, cerámicas, cartón, chapa, cuerdas,
madera, que se diferencien de las convencionales de los parlantes. A su vez, usamos piezoeléctricos que nos
permitían percibir los sonidos micros y cuando los amplificábamos con los
transductores, usamos esas diferentes texturas y materiales para experimentar
nuevas sonoridades. En este sentido vimos que cualquier superficie puede
funcionar como membrana, es decir, hacer pasar la vibración que es una manera
de “sacudir el aire”.
De esta manera, buscamos
transformar la energía, por ejemplo la energía eléctrica en vibraciones. Por
ejemplo, los micrófonos tomaban las vibraciones y las traducían en electricidad.
Para capturar sonidos micros usamos piezoeléctricos que construimos en el
laboratorio. Luego usamos transductores que funcionaban en tanto había algo que
vibraba antes para captarlo y retransmitirlo.
Las fuentes que
funcionarían como inputs para generar la acción podían ser analógicas o digitales.
Probamos múltiples tipos de movimientos electromecánicos y sonidos
distorsionados de nuestras propias discusiones en el lab, músicas digitalizadas,
aplausos y chasquidos que ingresaban por un mic y a través de Arduino detonaban
una acción.
Descubrimos que lo que puede ser capturado es la resonancia
y la vibración que producen tipos de onda que luego son convertidos a digital
cuando entran como inputs en las máquinas.
Luego de eso, son reconvertidos a
analógico para salir, expresarse y que pueda percibirse. Existen entonces conversores
para los inputs y conversores para los outputs. Dispositivos que decodifcan lenguajes
y vuelven a codificar para establecer conexiones.
Indagamos también
sobre el funcionamiento de la onda cuadrada y la onda continua. La onda cuadrada
está compuesta por datos discretos con cierta frecuencia que organizan muestras
por segundos, nuestra percepción produce la
continuidad, no está dada completa de antemano. Nuestro cerebro y percepción completa la
forma. En lo analógico, siempre entre dos datos va a haber otro, existe
el entre infinito, muestras de 44 mhz dan menos definición, muestras de 8000 mhz dan más definición. Cuando se acumulan ceros y unos discretos del
lenguaje digital logran una semejanza con la continuidad de lo analógico. La onda continúa, en lo analógico, está en el
“entre” que es imposible de medir, de capturar, es infinito.
De esta manera
arribamos a la idea de que todo lo digital tiene que convertirse a analógico
para poder ser percibido con el cuerpo.
Buscamos y
experimentamos con membranas que resuenan y vibran como si fueran cuerpos vibrátiles que podemos
escuchar, que tienen algún tipo de sonoridad. Los parlantes convencionales
tienen una membrana específica y suena como quiere esa superficie. Sin embargo,
usando el transductor elegís donde va a vibrar esa onda, donde va resonar.
El parlante funciona pero no como yo quiero, con las nuevas membranas acontece algo nuevo, un sonido que no esperábamos, que no habíamos pensado. Es un sonido acontecimiento.
Otra de las cosas que
experimentamos en el proceso de creación fueron las diferencias de escala, grandes diferencias de tamaño entre
la fuente y la salida. Lo micro y lo macro. Nos interesó experimentar con los
rangos de escalas que pudimos explorar.
Observamos, sentimos y
escuchamos que con algunas membranas se refuerzan las vibraciones. Probamos con
chapa, madera, cerámica, cables, cuerdas, vidrio, radiografías, hojas de
palmera, botellas de plástico, cartón, alambre y luego de hacer varias pruebas
elegimos algunas combinaciones que luego montaríamos como circuito
interconectado a modo de infinte loope.
Los transductores
demasiado cerca acoplan. Estalla. Ahí también experimentamos. Eso nos interesó
y jugamos con esta cercanía hasta crean una nueva combinación que generaba una
sonoridad interesante para nosotros.
Usamos conectores, conversores,
rutas, sensores de sonido y con esto pudimos interferir en el sentido y
potencia de las ondas. Probamos también con
invertir la polaridad. Pensamos en comenzar con un ventilador o un radiograbador
que tenga nuestras propias discusiones de producción y creación colectiva. Es
decir, reproducir el audio, la distancia entre lo que primero escuchas y lo que
viene después. Pensamos y exploramos imputs capacitados. Observamos que
podíamos actuar como capacitador que baja a cero voltios y comenzar desde la
interrupción, desde el silencio. Queríamos relacionar sensor, silencio,
ruido, interrupción, movimiento y reposo. Pensamos que las limitaciones son
potenciales en el proceso creativo. Pensamos en el deterioro de la cinta
analógica. Pesamos en reciclar los solenoides.
Usamos una Rasberry
como lo más complejo en tanto dispositivo. Tiene solo un procesador con entradas
y salidas. El procesador genera una secuencia para que percutan en los solenoides. Buscamos superficies
y materialidades para percutir. El circuito enviaría señal y Arduino se lo enviaría a solenoide. Pensamos
en programar una secuencia al azar de ritmo, que las secuencias cambien con
datos del exterior, y al enviarla al Arduino
y percutan los solenoides
En síntesis, en todo el proceso, buscamos
efectos de reverberación novedosos, que
nos provoquen una experiencia sensible, una experimentación estética nueva y
actual. Una conmoción. Elegimos qué recibir de afuera, lo
convertimos y sacamos algo nuevo, hicimos transmutaciones, trabajamos con
afecciones. Los cuerpos por donde pasaban esas vibraciones y resonancias no
eran los nuestros, pero cuando tuvimos que definir cuáles elegir, nuestros
cuerpos sí intervinieron en la toma de decisiones por cómo se vieron afectados
por eso que habíamos creado ahí afuera y con otros.
Decidimos que no
íbamos a comenzar el proceso desde una idea abstracta para luego plasmarla en
algo concreto. Decidimos experimentar y luego ver qué significaba, qué decía la
obra, qué expresaba ese agencimiento de creación colectiva como acontecimiento.
Referencias puestas por los integrantes en circulación
Panal lugar
Viceral muestra
Refe Williams
desintegración loops
https://www.facebook.com/barbadosnooficial
http://medialab-prado.es/article/funcionamientos-objetos-comunes-y-cuerpos-diversos
Audios
https://mega.nz/#!5lEFTS6R!lwxFctYtDpUeMESv6g0ufv-kEgEjSxlGJ-PSjluaM9k
https://mega.nz/#!5lEFTS6R!lwxFctYtDpUeMESv6g0ufv-kEgEjSxlGJ-PSjluaM9k
Ujino Muneteru:
http://www.see-this-sound.at/en